El diccionario define la palabra “Huérfano” como “un niño cuyo padre y madre son ambos muertos”. Ahora hay un nuevo tipo de huérfano.
Estos “huérfanos” son los niños cuyos padres—ambos padre y madre— están vivos, pero han sido deportados de los Estados Unidos por su estatus ilegal.
Se podría pensar que los inmigrantes indocumentados ya tienen suficiente de que preocuparse: desde el momento en el que ellos deciden tratar de entrar a los Estados Unidos mas todo las preocupaciones y miedos de si ellos van a llegar y lograr quedarse aquí.
Mexicanos, claro, tienen el reto peligroso de cruzar la frontera sur de los estados Unidos, con todos sus dispositivos de vigilancia de alta tecnología y agentes fronterizos agresivos. Pero solo piensa sobre los de Centro América—Guatemaltecos, Salvadoreños, Nicaragüenses, etc.— quienes enfrentan el desafío adicional de cruzar la frontera del sur de México, un paso que puede ser igual de peligroso, más si los agentes fronterizos pueden ser más irregulares e inconstantes en hacer cumplir las regulaciones de México que hay en contra los ilegales.
Una vez aquí, los peligros en la que viven los inmigrantes indocumentados en los Estados Unidos son demasiados para mencionar, y puede ser objeto de piezas posteriores.
Por ahora el problema es que vamos a hacer acerca de los nuevos “Huérfanos” (hijos de los deportados) necesidades que deben abordarse. Desde recién nacidos hasta jóvenes, los nuevos “Huérfanos” han tenido la necesidad de recurrir a ayudas del gobierno, seguros sociales, y organizaciones no lucrativas con toda una serie de nuevos problemas. El acogimiento familiar, servicios de salud, los orfanatos, los servicios de protección de menores y educadores todos estamos sintiendo el impacto de la nueva clase de “huérfanos”.
Números exactos son difíciles de descifrar. Sin embargo, la Seguridad Nacional del Servicio de Inmigración estima que hay unos 11,5 millones de inmigrantes indocumentados en los Estados Unidos hoy en día. Entre estos número se estima un rango de edades entre0-18 años de podrían ser de aproximadamente 12% o 1,3 millones.
Solo imaginemos la situación de un niño de seis meses cuyos padres son puestos en prisión o en realidad son deportados. Cuál es la posibilidad de esta familia volver a estar reunida? Podemos asegurar que las posibilidades son muy escasas. ¿Quién los va a alimentar, a vestir, a mirar su por la salud y un sano desarrollo de un niño que está en estas condiciones?
El cuidado de crianza o los orfanatos son las únicas alternativas que tienen. Una fuente informo de que los Estados Unidos gastan $ 22 mil millones al año en el cuidado de los niños en cuidado de crianza, con un promedio alrededor de $ 40.000 por niño. El Servicios de Protección Infantil por ley ni siquiera pueden colocar a los niños cuyos padres son indocumentados.
No sólo recién nacidos indefensos, sino también a los que de edad escolar que son huérfanos que están en una tremenda desventaja para su desarrollo educativo.
California, Texas, Florida, Illinois y Nueva York enfrentan la peor parte de estos problemas con más de la mitad de la población inmigrante.
Publicaremos más sobre estas cuestiones más adelante.