Estados Unidos está cerca a elecciones de II clase de la Cámara de Representantes. Esas elecciones son muy importantes para el presidente Obama ya que de ganarlas se podría aprobar casi con seguridad la ley migratoria que tanto ha promovido desde el inicio de su primer mandato y ahora esta estancando por parte de los republicanos. Se espera esa ley ayude a los cerca de 12 millones de sin papeles que ahora residen en Estados Unidos y ponga fin a los problemas en las fronteras donde a diario cientos de sin papeles intentan cruzar. De no ganar su partido las elecciones, el piensa “saltar” a la Cámara y aprobar la ley mediante una orden ejecutiva que de hacerle, generaría mucha polémica tanto en la Cámara como dentro de los Demócratas.
El voto latino cada vez tiene mayor importancia en las elecciones de autoridades, por lo que republicanos y demócratas están tomando estrategias para captar su voto. El principal tema es el migratorio y ambos dicen apoyar la ley o dar beneficios a aquellos sin papeles que trabajan y hacen crecer al país. Pero también se cuidan ya que muchos americanos no desean amnistía a los sin papeles y que se deporte a quienes son malos elementos. Con el reciente fenómeno de los niños que llegan solos a la frontera a pedir refugio solo manifiesta que deben controlarse y ayudar a las víctimas de pandillas y narcotráfico. Para eso se ha iniciado campañas con sus países de origen para evitar que sigan llegando al país porque por ahora su destino será la deportación tarde o temprano.
A pesar de los riesgos, Obama está decidido a ejecutar la ley migratoria luego del receso de verano (septiembre). El presidente está molesto por la inacción de los republicanos en la Cámara de Representantes ante un proyecto de ley migratorio aprobado el 2013 por el Senado. La crisis por el flujo de menores de edad que han cruzado la frontera sin acompañantes no parece haberlo disuadido. Ya el presidente presento un recurso para frenar las deportaciones lo cual trajo polémica por parte de los republicanos. Luego del receso todos los ciudadanos estarán esperando que decidan la Cámara y el presidente.