Ya culmino el verano en los Estados Unidos y septiembre se perfila como un mes donde existirán muchas novedades en referencia a la ley migratoria. El presidente aun tiene pensado utilizar una acción diferida para poder cambiar en algo el sistema migratorio que no puede dar soluciones a los problemas existentes. Esa decisión le podrían traer problemas con el partido republicano por eso aun no lo ejecuta además, planea realizarlo de tal forma que no exista algún elemento jurídico que puedan presentar para detenerla. La ley aun se debate en la cámara de representantes y al estar estancada la ultima seria actuar de esa forma. Asesores del presidente le han solicitado que espere hasta después de las elecciones de noviembre ya que de lograr una victoria sería más viable aprobar la ley sin necesidad de la acción ejecutiva que causaría problemas entre partidos.
Lo aconsejable para que todos ganen es trabajar de manera conjunta y esperar que suceda hasta después de las elecciones. El presidente también tiene mucha presión de la ciudadanía y en especial de los activistas en apoyo a los sin papeles. La última semana de Agosto realizaron varias manifestaciones en favor de la ley migratoria en diferentes ciudades y realizaron un plantón en la casa blanca. Varias personas fueron detenidas y al final de la concentración gritaban “si se puede”. Los manifestantes aseguran que darán su voto en noviembre a quien impulse la reforma migratoria y ayude a la estabilidad de los sin papeles.
A pesar que el último mes se ha reducido el paso de migrantes y en especial los niños que llegaban solos a la frontera pidiendo asilo gracias a la campaña en conjunto con países vecinos, es necesario que la ley sea aprobada de manera conjunta para que no existan problemas como sucedió cuando el presidente de manera unilateral brindo ayuda a los “Dreamers” lo cual fue una solución a corto plazo con problemas políticos que hasta ahora persisten.