Cada vez que se captura un inmigrante sin papeles en la frontera o llega un niño en busca de refugio se tiene la mala idea que es mexicano. Además de las resientes declaraciones del pre candidato presidencial, Donald Trump, donde indica que todos los mexicanos que llegan a Estados Unidos son delincuentes y que México solo envía lo peor de su sociedad. Estadísticas reciente por parte de los estados unidos demuestra que la llegada de Mexicanos ha disminuido cada año y eso se debe a varios factores, a inicios de la década pasada el flujo era mayor alcanzado su máximo record entre 2003 y 2004 pero la recuperación parcial de la economía mexicana y la gran crisis de los Estados Unidos en 2008 fueron factores para que cada vez menos mexicanos lleguen. Lo que si se ha incrementado es el ingreso de personas de países como Guatemala El Salvador y Honduras.
Desde la llegada del presidente Obama al poder, se ha intentado aprobar reformas para ayudar a los inmigrantes sin papeles pero de la mano con mayor control en las fronteras. Las reformas no han podido ser aprobadas ya que el partido republicano se opone por considerar que se debe llegar a un acuerdo y no solo dictaminarlo por órdenes ejecutivas. Cuando se intento llegar a un acuerdo se lo logro en primera instancia en el Senado pero luego quedo estancada en la cámara de representantes. Las primeras órdenes ejecutivas en 2012 ayudó a los Dreamers pero las segundas donde se pretendía ayudar a 5 millones de sin papeles aproximadamente fueron frenadas por una corte de Texas ya que 26 Estados denunciaron que no era facultad del presidente.
Cuando existe un problema es necesario detectarlo para darle una solución y si los mexicanos son los culpables de los problemas en Estados Unidos con su expulsión se solucionaría pero sabemos que no es verdad. Estados unidos es un país de inmigrantes y nunca todos los inmigrantes serán buenos pero la mayoría sí.