Cada vez que un inmigrante sin papeles es atrapado o capturado este enfrentara un juicio migratorio para determinar si puede permanecer en el país o es deportado hacia su lugar de origen. La mayoría de los juicios migratorios están en los Estados del sur que son frontera con México pero hay que recordar que muchos sin papeles entraron al país de forma legal pero al quedarse más del tiempo permitido sus permisos han caducado. El problema ahora mencionan las autoridades es que los juicios migratorios tardan demasiado tiempo y una de las causas principales es que no existen la cantidad de jueces necesarios para la demanda existente. Ha pesar que se han aumentado el número de jueces aun estos no se pueden descachar los juicios en un tiempo normal en comparación a otros juicios.
Este problema a colapsado todas las salas de juicios migratorios y el tiempo hasta esperar el primer llamado a juicio puede variar incluso hasta esperar 3 años. El año pasado con la llegada de los niños migrantes el problema se profundizo más. La mayoría de los juicios son para deportar a los sin papeles ya que también existen pedidos de asilo político o humanitario pero estos son pocos y en especial cuando son juicios políticos estos son rechazados. Existe la orden que cualquier inmigrante sin papeles que sea capturado tiene prioridad para un juicio de deportación pero, qué sucede con los otros juicios. Solo hacen más largo el tiempo de espera.
Las acciones ejecutivas de noviembre del 2014 tenían como posible solución dar alivio a las cortes y se concentraran solo en los recién llegados ya que para los que arribaron antes del 2010 se plantea un pan de permiso y trabajo temporal pero hasta que no se conozca el resulta de la apelación, las acciones están congeladas. También es necesario capacitar y especializar más jueces de migración hasta llegar a un punto de equilibrio y los juicios sean en el tiempo promedio a cualquier otro juicio.