La Administración notificó la semana pasada que esta cambiando la regla de perdones para cónyuges indocumentados e hijos de ciudadanos estadounidenses. Para evitar la larga separación, perdones de visa pueden ser otorgados aquí en lugar de en el extranjero. El proceso de visa en el país natal creaba temor que el perdón pueda ser negado o retrasado por meses o hasta años. Esta incertidumbre llevó a muchos a decidir permanecer en los Estados Unidos antes de arriesgarse a una posibilidad de negación o a un retraso extensivo que impondría una separación de las familias aquí.
La requerida prueba era demostrar extrema dificultad al cónyuge o padre ciudadano estadounidense. Funcionarios consulares eran conocidos por ser arbitrarios o caprichosos. El Congreso también ha sido inflexible en resistirse a ceder y poder superar esta difícil situación de la separación entre cónyuges y entre padres e hijos. Esto significaría ahora que familias se mantendrán juntas con tan solo semanas de separación.
Esta forma de procedimiento que cambia el lugar donde perdones son otorgados ha eliminado la necesidad de acción del Congreso. Le permite al Servicio de Inmigración dictar reglamentos al respecto de mejorar los recursos y eficiencia del Servicio de Inmigración acortando la separación entre miembros de familia. Esta Orden permitirá a cientos de miles de extranjeros indocumentados a salir de las sombras porque ellos podrán solicitar los Perdones necesarios en los Estados Unidos en vez de en su propio país. Cuando un Perdón es aprobado aquí, se le aseguraría al extranjero indocumentado un pronto regreso del extranjero a los Estados Unidos para estar con su familia. La Administración ha predicho que este viaje solo es necesario por unas semanas y no meses o años. Para los funcionarios Consulares, la cuestión de la estadía de un indocumentado en los Estados Unidos seria superada, y por lo tanto, le permitiría al Consulado emitir la visa de inmigrante rápidamente.